El Ayuntamiento de Castell-Platja d'Aro, en 1998, decidió desarrollar una serie de actuaciones urbanísticas, entre las que estaba la Rambla del Castell. Fruto de aquella decisión ha sido la redacción y aprobación de la Modificación Puntual del Plan General, el Plan Parcial de Rambla del Castell y el Proyecto de Urbanización del Plan Parcial.
Con los años, Platja d'Aro se ha convertido en uno de los centros de servicios turísticos más importantes de la Costa Brava Norte. Buscando mejorar la imagen y los servicios de la ciudad, aparece la ordenación de la Rambla como una magnífica oportunidad para ubicar ofertas lúdicas, para dar salida a la demanda de la ciudad y para desarrollar la ordenación con criterios de integración paisajística.
La propuesta diseñaba esta área como una gran avenida, de sección asimétrica, sobre la que se organizaban -en varias bandas paralelas a la vía- los diferentes espacios y usos, tanto públicos como privados. La propuesta de ordenación definía una primera franja de50m. de ancho, sobre la que se desarrollaba el espacio público. Mientras que en la parte posterior, se establecía un lado edificable, que actuaba a modo de zócalo con una altura máxima de dos plantas. En esta parte se localizaban las actividades de tipo comercial, restauración, discotecas, pubs, multicines, etc. Mientras que detrás de la edificación, fuera de las vistas del paseo principal, se emplazaban las áreas de aparcamiento al servicio de cada equipamiento privado.